Palabra Del DÃa: Burlarse
Para tratar con desprecio o ridÃculo; frustrar a las esperanzas de.
Damaris era de Atenas, Grecia y su nombre significa "novilla", Atenas es la ciudad más grande de su paÃs. Atenas lleva el nombre de Atenea, la diosa de la sabidurÃa y la guerra. Atenas se encuentra a 50 millas al este de Corinto y está rodeada de montañas. Esta ciudad también fue muy famosa por su gente intelectual.
Pablo les ministró durante su segundo viaje misionero, pero solo tuvo unos pocos conversos y nunca se inició una iglesia allÃ. Pablo debe haberse sentido solo en esta ciudad, esta ciudad no lo recibió como lo hicieron otras ciudades como Corinto, Tesalónica, Berea y otros. Atenas era una ciudad hermosa y dondequiera que miraras habÃa esculturas y obras de arte que representaban a sus dioses. Durante esos dÃas, Atenas ya no era parte del Imperio Romano, habÃan sido libres para perseguir sus propios objetivos.
Esta ciudad no es diferente a las ciudades en las que vivimos en la sociedad actual, nuestros dioses podrÃan ser la licorerÃa, el dispensador de marihuana, la ClÃnica Plan Parenthood, nuestros trabajos, nuestros deportes o cualquier otra forma de entretenimiento que le quite tiempo a nuestro Dios.
Pablo habÃa venido a ministrar a estas personas y estaba muy impresionado con su conocimiento, pero también estaba impresionado sobre cuán tonto puede ser una persona en su sabidurÃa humana. Se habÃan entregado tanto a la idolatrÃa que sus corazones nunca estuvieron abiertos al Evangelio.
Hechos 17:16
Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espÃritu se enardecÃa viendo la ciudad entregada a la idolatrÃa.
Pablo no perdió el tiempo y les predicó todos los dÃas que estaba allÃ, se reunió con los judÃos, los piadosos y los filósofos de ese pueblo. Los judÃos que estaban allà también eran idólatras, ya que pensaban que Pablo estaba haciendo un anuncio para agregar otro Ãdolo a su lista. Esos judÃos habÃan adoptado la forma de vivir y adorar de Atenas. El segundo grupo era la gente piadosa (religiosa) de Agora, que era el centro de los atenienses, esta era la ubicación de los museos, templos, estatuas y edificios públicos ... El tercer grupo eran los filósofos de los epicúreos y de los estoicos que se les enseñó que los dioses existen pero que no están interesados en los asuntos humanos. Esto significaba que se les negaba la verdad de la vida después de la muerte, ya sea en el cielo o en el infierno. Esta es la razón por la cual eran paganos, ya que se pensaba que nunca serÃan responsables de sus acciones.
Hechos 17:17-18
Asà que discutÃa en la sinagoga con los judÃos y piadosos, y en la plaza cada dÃa con los que concurrÃan.
18 Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos disputaban con él; y unos decÃan: ¿Qué querrá decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba el evangelio de Jesús, y de la resurrección.
Pablo se puso de pie y predicó uno de los mejores sermones a estas personas. El público estaba allÃ, asà que los llamó "muy religiosos", pero lo que en realidad los llamó fue "religiosos". Pablo era un hombre inteligente y no iba a comenzar el sermón, siendo grosero, el llamarlos religiosos era solamente una forma de llamar su atención ya que se consideraban devotos de sus dioses. Los atenienses se consideraban tan inteligentes que incluso crearon un dios llamado "Al Dios No Conocido" o "agnostos" y Pablo estaba allà para declararles ese verdadero Dios. TenÃan innumerables Ãdolos y Pablo les recuerda que el Dios verdadero hizo el mundo y que no habita en templos hechos a mano, lo que significa que nuestro Dios no estaba en el templo de Marte o en el Partenón de Minerva, que era una maravilla del mundo. Este era un mensaje de arrepentimiento, Pablo estaba insinuando que vendrÃa un dÃa el juicio, pero la teologÃa griega enseñaba que no habÃa futuro después de la muerte, por lo tanto, no creÃan en la venida del dÃa del juicio. Pablo también agregó a su mensaje sobre la resurrección de Jesucristo lo que significa que nuestro Dios vive y que Él no es una piedra muerta como sus Ãdolos. Cuando escucharon de la resurrección de la muerte, se burlaron de él. Entre esas personas estaban Dionisio el Areopagita, miembro del sumo consejo ateniense y Damaris, que se negaron a burlarse del Evangelio. También hubo otros que aceptaron a Jesucristo como su Salvador, pero no lo suficiente como para comenzar una iglesia.
Hechos 17:22-34
22 Entonces Pablo, puesto en pie en medio del Areópago, dijo: Varones atenienses, en todo observo que sois muy religiosos;
23 porque pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio.
24 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas,
25 ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas.
26 Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los lÃmites de su habitación;
27 para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros.
28 Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.
29 Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de imaginación de hombres.
30Â Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;
31 por cuanto ha establecido un dÃa en el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos.
32 Pero cuando oyeron lo de la resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decÃan: Ya te oiremos acerca de esto otra vez.
33 Y asà Pablo salió de en medio de ellos.
34 Mas algunos creyeron, juntándose con él; entre los cuales estaba Dionisio el areopagita, una mujer llamada Dámaris, y otros con ellos.
Conclusión: Estamos viviendo en tiempos de incertidumbre en este momento donde la gente tiene tanto miedo. Como cristianos tenemos la tendencia a llamarnos personas de fe, pero la prueba ha llegado y algunos de nosotros todavÃa nos preguntamos cuál será el próximo paso. Seamos obedientes al Señor, independientemente de los tiempos, ahora es el momento de demostrar a los demás que nuestro Dios es un Dios grande y que Él esta en control.
*Por favor deje un comentario si esta lección ha sido de bendición a su vida.
He agregado algunos versÃculos a continuación para aquellos que no están seguros si el cielo es su futuro hogar. Por favor, comparta conmigo si acepta al Señor Jesucristo como su Salvador a través de esta publicación. ¡Con gusto me alegraré con usted!
9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
11 Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.
12 Porque no hay diferencia entre judÃo y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que le invocan;
13 porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.
Romanos 10:9–13